Por José Gase
Son los miedos del pasado, fundados en añejos tropiezos y que hoy jugarán contra los dos aspirantes a un título que significará el cuarto en la historia para el ganador. Santos nunca ha logrado alzar la copa en una final fuera de su estadio. Y Monterrey ha caído en las últimas tres finales disputadas en el estadio Tecnológico: sólo en el torneo México 1986 pudo celebrar ahí, con su público. Sí, hace ya distantes 24 años, tras vencer al Tampico Madero.
El alivio será para el club que rompa sus temores. El otro guardará la estadística como estaca entre las costillas, además del dolor que le provoque caer en la histórica contienda.
En seis finales disputadas por los laguneros en su corto historial en el máximo circuito han ganado tres, pero siempre como locales en el desaparecido estadio Corona. Cayeron en las otras: dos de estas contra Toluca, en el Nemesio Díez [Bicentenario 2010 y Verano 2000] y la otra en 1993-94, en Zapopan, contra los entonces Tecos que dirigía, Víctor Manuel Vucetich, a quien curiosamente vencieron en la serie de ida por el título de aquella campaña [1-0] y también en la actual [3-2].
"Yo creo que la estadística está para eso, para hacer historia, para ser simple estadística y al final del día no hay nada que el poder del trabajo y de los sueños no pueda lograr y en ese sentido haremos nuestro mejor esfuerzo", expresa Alejandro Irarragorri, presidente del Santos Laguna, el más convencido en superar los traumas del pasado.
En coincidencia numérica, el Monterrey también ha celebrado seis finales y de igual forma se ha llevado tres a sus vitrinas y en las otras le ha tocado cargar con la derrota. El primero de ellos lo obtuvo en casa (1986). Los dos siguientes se los llevaron en Morelia (Clausura 2003) y en el Distrito Federal ante Cruz Azul (Apertura 2009).
Extrañamente, las recientes finales en el Tec han sido para el visitante. Sucedió en 1992-93 frente al Atlante, el Apertura 2004 contra el bicampeón Pumas y el Apertura 2005 a manos del Toluca. En ninguna de las tres La Pandilla marcó gol en su escenario.
"Esperemos que el certamen culmine como todos lo anhelamos, con un campeonato para nuestra afición", clama Jorge Urdiales, presidente rayado.
"Aquí en Monterrey, en 1986, se logró. Esperemos que se vuelva a conseguir, porque tuvimos dos que no logramos aquí: la de 2004 y la de 2005", añade Urdiales, en alusión únicamente a las que corresponden a su administración.
"Es un gran deseo el de poderle dar una gran alegría a nuestra gente. Estamos muy conscientes del compromiso y de la posibilidad. Hay que buscarla y Dios dirá si fuimos merecedores o no de un campeonato nuevamente".
La ocasión lo amerita. Monterrey y Santos van contra sus propios males y el vencedor plasmará su nombre en solitario como el octavo equipo con más títulos en la historia profesional del futbol mexicano.
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